MINI John Cooper Works domina las legendarias curvas de Irohazaka
En el corazón de las montañas de Nikko, donde el paisaje otoñal pinta escenas espectaculares, la carretera de Irohazaka despliega sus 48 curvas desafiantes que han encontrado su rival perfecto: el MINI John Cooper Works. Este modelo demuestra que la pasión por la conducción puede florecer incluso en los trazados más exigentes del mundo.
La carretera que conecta el Parque Nacional de Nikko con la meseta de Oku-Nikko, ubicada a aproximadamente 180 kilómetros de Tokio, se convierte en el escenario ideal para poner a prueba las capacidades de este automóvil. Equipado con un motor gasolina biturbo de 2.0 litros y cuatro cilindros, desarrolla 231 caballos de potencia (170 kW) y un par máximo de 380 Nm, cifras que transforman cada curva en una experiencia de conducción electrizante.
ESPECIFICACIONES TÉCNICAS
– Motor: 2.0 litros biturbo de gasolina, 4 cilindros
– Potencia: 231 hp (170 kW)
– Par máximo: 380 Nm
– Transmisión: automática de 7 velocidades con doble embrague
– Distancia desde Tokio: 180 km
– Curvas en Irohazaka: 48
– Material gráfico disponible: 39 fotografías
La transmisión automática de siete velocidades con doble embrague proporciona cambios rápidos y precisos, mientras que las levas de cambio de serie ofrecen al conductor un control absoluto sobre las prestaciones. La suspensión especialmente afinada entrega esa sensación característica de “Go-Kart Feeling” con un manejo ágil, complementado por un sistema de frenos pintado en Chilli Red con el logotipo JCW que garantiza máxima precisión y seguridad incluso en las situaciones más exigentes.
Ya sea enfrentando estrechas carreteras de montaña o disfrutando de pasajes abiertos, el MINI John Cooper Works demuestra su excelente dinámica de conducción y manejo ágil, consolidándose como el compañ



